Hace un par de años Artur Mas vino a Tarragona a presentarnos un gran
proyecto de inversión del Gobierno catalán, BCN World. Era la gran panacea:
un enorme complejo de ocio a nivel mundial de 500.000 metros cuadrados y 3.000
habitaciones que crearía más de 40.000 empleos.
Se nos dijo que había inversores de todo el mundo muy interesados,
desde norteamericanos a chinos pasando por árabes. Tres mil familias
tarraconenses como la mía confiamos y presentamos nuestro currí- culo. Y ahora
resulta que nada de nada. Artur Mas entierra el que era el principal proyecto
de inversión y creación de empleo del Gobierno catalán en la provincia de
Tarragona. Y lo anuncia justo tras las elecciones, claro. Faltaría más. Un
enorme fiasco que ha jugado con muy poca ética con la ilusión de mucha gente.
Teresa Lozano. Tarragona
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